Cuando hay crisis, es cuando más necesaria es una prensa valiente, sin miedo y libre
“Grandeza hay en el periodismo, miseria en su sumisión. Se escribe con libertad o no se escribe. El escritor es la pasión por la verdad”, dijo una vez el insigne periodista, poeta y autor puertorriqueño don Salvador Tió.
Hace unos días, su hija, mi querida amiga y también poeta Elsa Tió me envió esa frase en un email que me conmovió en lo más profundo del corazón. En las entrañas realmente. Fue como como si me estuviera jamaqueando el espíritu, y todo mi ser para que despertara del dolor y abriera los ojos. Esa verdad es irrefutable. El periodismo tiene que ser libre o no es. Tan sencillo como eso.
Ahora que estamos próximos a conmemorar otra Semana de la Prensa en Puerto Rico, y en medio de la vorágine que he vivido a nivel personal en los últimos meses y particularmente en la última semana y media por los insultos, amenazas y persecución de la que he sido objeto, esa frase de Salvador Tió caló hondo. Me hizo recordar que no es periodismo los que muchos dicen hacer. El tener miedo de hacer las preguntas duras para que el jefe no te regañe o el dueño del medio no te bote, o el terror a caer mal o a no conseguir “likes” o “followers” en las redes sociales, eso no es periodismo. Quien tenga miedo, no es periodista.
No es periodismo eso que hacen muchos de estar amarrados a los sectores políticos, o al gobierno. No es periodismo creerse artista o un personality. Tampoco es creer lo que dicen los supuestos analistas sin exigirles que digan a qué clientes representan. Por cierto, los politiqueros y cabilderos al aire en radio y televisión, tampoco son periodistas.
La frase del insigne poeta me hizo reflexionar en la necesidad urgente de que estas cosas se hablen abiertamente por los periodistas y el pueblo, no por los enemigos de la libertad y la verdad que buscan confundir al mismo pueblo. El trabajo de la prensa, pero de una prensa libre, es más urgente y necesario que nunca, cuando el periodismo es objeto de tanto odio y persecución.
Cuando hay crisis, es cuando más necesaria es una prensa valiente, sin miedo y libre. En Puerto Rico esto es urgente. No se trata de tener más medios o programas de noticias, sino de una prensa de mayor compromiso con la verdad, que reporte lo importante y eso requiere muchos sacrificios.