Decir Kobbo Santarrosa es casi como mentarle la
madre a muchos, especialmente a los periodistas. Su estilo irreverente, inculto
y vulgar apela a las masas, pero no sólo las masas de irreverentes, incultos y
vulgares, sino a todo el mundo. A través de su alter ego, La Comay, dice lo que
algunos- incluyéndolo quizás a él mismo - no se atreven decir, insulta y se
burla de muchos otros, y va tras casos que la prensa toca superficialmente.
En su programa SuperXclusivo, así, mal escrito,
acapara la opinión pública porque es él quien casi siempre dicta lo que se
discute en el país. Y por más que digan que no ven el programa, o que se
toparon por casualidad porque estaban cambiando de canal, lo cierto es que todo
el mundo lo ve.
Esta semana Santarrosa – quien siempre ha
buscado una legitimación a su trabajo y que le respeten por lo que hace – dio
un palo que tiene que haber roto todos los récords de audiencia con la
entrevista que le realizó a Jesús Genaro Camacho, uno de los imputados en el
caso de asesinato del niño Lorenzo González Cacho, a dos años del incidente que
aún no se esclarece por las autoridades.
En su más reciente edición del programa “A
solas con Kobbo”, se salió de su disfraz de la muñeca y de frente, se convirtió
en entrevistador, el sueño de muchos periodistas. Con rating alto, respaldo de
la televisora y anunciantes, especialmente políticos, a tutiplén. Proyectó en
ese programa lo que logran con éxito entrevistadores a nivel internacional,
como una vez hizo Oprah Winfrey, como hace Barbara Walters o Anderson Cooper.
Periodistas que entrevistan.Un periodista es aquella persona que se dedica profesional y éticamente al periodismo en cualquiera de sus formas, sea en prensa escrita, radio, televisión o medios digitales. Su trabajo consiste en descubrir e investigar temas de interés público, contrastarlos, sintetizarlos, jerarquizarlos y publicarlos. Para ello recurre a fuentes periodísticas fiables y verificables. Así elabora sus artículos, que pueden tomar varias formas para su difusión: oral, escrita, visual, según define Wikipedia.
¿Es Kobbo Santarrosa un periodista? En términos reales, no lo es. El no hace un ejercicio de periodismo real en el sentido de que no es balanceado, es burlón y no presenta los dos lados de la moneda. En sus burlas perpetúa prácticas deplorables como cuando se burla de los negros, de las mujeres y de los homosexuales, como hace constantemente. Mira la paja en el ojo ajeno, pero no dice sus errores, ni los de su acompañante.
Sin embargo, en términos de lo que dice la
Constitución, el sí tiene derecho a publicar lo que le parezca y ejerce una
función informativa. Que no siga los cánones de ética es una cosa, pero no se
puede tapar el cielo con una mano.
Existen varios principios que guían la labor del periodista, el principal
de los cuales es el respeto por la verdad, el rigor en la búsqueda de la
información fidedigna y verificable. En general, se considera buen periodista
al que consigue información relevante, breve y exacta en el menor tiempo
posible. Kobbo Santarrosa
le da seguimiento a los casos que entiende que le van a generar rating, tiene sus fuentes y publica
informaciones que luego le copian todos los periódicos y telediarios.
De cómo accede a la información, es otro
asunto. Se alega que él paga a funcionarios en el Departamento Justicia y en la
Administración de Tribunales para que le den documentos confidenciales. De
hecho, esto se cuestionó recientemente con la lectura de extractos del sumario
fiscal, que es un documento confidencial, en el caso de violencia doméstica contra
el ex representante Héctor Ferrer. Continuamente se le cuestiona lo mismo con
el caso del niño Lorenzo, pero las autoridades no dicen nada. De hecho, el
Secretario de Justicia Guillermo Somoza hace mutis.
De ser ciertas estas alegaciones contra Santarrosa,
podríamos estar frente a un escándalo de marca mayor, algo parecido al caso que
se discute en Inglaterra con los periódicos de Rupert Murdoch. Allá se pagaba a
policías y se hacían grabaciones ilícitas para luego publicar noticias de
artistas y políticos, acá, si esto es cierto, serían documentos judiciales para
desprestigiar personas en el foro de la opinión pública. Sobre estas
alegaciones, Santarrosa se limita a decir que tiene sus informantes, los
agentes 007-Tribunales o como les llame. Lo convierte en chacota.
Lo que no se puede discutir es que si no fuera
por el seguimiento diario en su programa, el caso del niño Lorenzo se hubiera
olvidado. (Ver referencia: http://enblancoynegromedia.blogspot.com/2011/07/casey-anthony-y-ana-cacho-dos-casos.html)
Durante la transmisión del programa “A solas
con Kobbo”, inicié una serie de comentarios en las redes sociales de Facebook y
Twitter que recibieron cientos de mensajes de respuesta. En Twitter, en la
cuenta @srodriguezcotto, emití 40 mensajes de análisis del programa. A continuación
presento un resumen de los más importantes:
1. Kobbo Santarrosa continuó
estigmatizando a Ana Cacho al reiterar la pregunta de si tenían una orgía en la
casa donde mataron al niño. En más de seis ocasiones habló de que ella había
tenido relaciones sexuales con más de un hombre.
2. Kobbo Santarrosa demostró falta de
erudición en la forma en que preguntaba, sin embargo, sí tenía profundo
conocimiento del caso del niño Lorenzo.
3. Jesús Genaro Camaño dijo: que ha ido
4 veces a declarar al Departamento de Justicia; que los fiscales Casiano, Meléndez
y otros tenían "actitud hostil" en el cuarto interrogatorio; y que
Meléndez le ofreció inmunidad. También negó tener un pacto de silencio.
4. El lenguaje corporal de Camacho – su
tono y gestos – demostró que mentía, que fue ensayado y que se puso nervioso
tras ver el vídeo del padre del niño Lorenzo Amhed Ali González.
5. Kobbo Santarrosa le advirtió a Camacho
que si cae en la cárcel le darán la bienvenida, que no le creyó lo que dijo y que
irá a la cárcel. “Te garantizo que antes de 2 meses van a radicar cargos y te
van a acusar”, le dijo a Camacho.
6. Kobbo Santarrosa debió haber visto
el sumario fiscal y sin duda tiene toda la información del caso. Esta bien
preparado en el tema.
7. Sin duda, fue el programa más visto.
Por eso todos los políticos pautaron anuncios en el programa
Y mientras se sigue con el espectáculo, el interés de ser entrevistador o no, una verdad sigue viva en el aire: al día de hoy no se ha hecho justicia para esclarecer el asesinato del niño Lorenzo González Cacho.
http://www.wapa.tv/noticias/especiales/a-solas-con-kobbo-santarrosa---1_20120309201650.html
Excelente analisis amiga. Bueno como todos...
ReplyDeleteAunque no les guste a muchos de los llamados "periodistas", Cobo Santarrosa hace el trabajo que muchos de estos senores no hacen. La figura de Santa Rosa les provoca envidia y buscan la manera de criticarlo., un sector clasista y elitista de la prensa no quiere aceptar que el es mejor reportero que ellos,
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