Periodista independiente en Puerto Rico

Monday, March 7, 2022

D’Monte ordenó matar a periodista de Vancouver Sun, narra experiencia; EU-Canada deciden extradición de narco


Kim Bolan, periodista de Vancouver Sun, amenazada por Conor Vincent D'Monte.

Esta semana se llevará a cabo una vista para determinar si se agiliza o no la extradición a Canadá del peligroso narcotraficante Conor Vincent D’Monte. El hombre que se hizo pasar por filántropo y tuvo acceso a todos los centros de poder económico y político en Puerto Rico hasta La Fortaleza, tiene un temible historial en el que se le imputa un asesinato y conspiración para cometer otros 12, incluyendo el de la periodista Kim Boland, del periódico Vancouver Sun.

Fuentes aseguran que el gobierno de los Estados Unidos tiene información contundente acerca de que el hombre tenía pasaporte, número de seguro social y varias licencias de conducir que pertenecían a una persona sin hogar. Según las fuentes, esto y otras infracciones que no se detallaron, podían conllevar cárcel en los Estados Unidos. 

Kevin LeClair, miembro de la ganga Red Scorpion, fue asesinado en el 2009 por D'Monte.

Sin embargo, en la jurisdicción de Canadá enfrenta cargos aún mayores. D’Monte está acusado de asesinato en primer grado y conspiración para cometer otros 12 asesinatos entre los años 2008 y 2009.

“La gente que sabe sabía del caso estaban contentos de que lo cogieron y en shock porque fue tan lejos, en Puerto Rico”, dijo Boland sobre el arresto de D’Monte, quien lleva a 11 años evadido de las autoridades.

En Puerto Rico se hacía llamar Jonathan o Jonny Williams, pero la periodista explicó que en Canadá también usaba el nombre de Jonathan Wilson el dirigente de la ganga criminal llamada Organización de Naciones Unidas (ONU).

“Muchas cosas han ocurrido desde que se fue a la huida. Cuando él dirigía esa organización, los miembros de la ganga ONU se pasaban guiando en las calles de Vancouver. Iban con escopetas AK-47 en sus vehículos y eso es ilegal. Se pasaban persiguiendo a personas que eran sus rivales en otras gangas. Los corrían en conciertos multitudinarios, en restaurantes, en centros comerciales o restaurantes, y llegaban a lugares donde hubiese público para matarlos allí”, narró Boland.

Conor Vicent D'Monte utilizaba varios nombres falsos.

La persona que ordenó esa guerra fue D’Monte. “Hubo casos de personas que eran inocentes y no tenían nada que ver con las gangas, pero estaban cerca cuando hubo los tiroteos y fueron heridos. Una persona murió que no tenía absolutamente nada que ver con eso, y las órdenes de matarlos las dio D’Monte”, agregó.

La ganga ONU comenzó en el 1997 entre muchos jóvenes refugiados de países de Asia y de otros lugares o de personas que no se llevaban con otra ganga, los White Angels, que estaba compuestas por supremacistas blancos racistas, que no permitían minorías negros ni latinos entre sus miembros. Los jóvenes comenzaron la ganga bajo el mandato de Clayton Roueche, quien seguía un estricto código de usar apodos para identificarlos.

Con el tiempo hubo peleas entre las gangas, pero la ONU siguió creciendo hasta que Roueche fue detenido intentado llegar a México en el 2008. El gobierno de los Estados Unidos lo acusó por narcotráfico y lavado de dinero, por lo que cumple una sentencia de 24 años en prisión.

“Cuando él salió del panorama, entonces D’Monte se convirtió en el líder de la organización, hasta que salió huyendo”, dijo Boland.

La veterana periodista investigativa dijo que, con el tiempo, otros líderes de la ONU fueron detenidos en otros países a donde han expandido los tentáculos. Esa ganga tiene operaciones en Dubai, Tailandia y Vietnam, en donde viven varios de los líderes. Una semana antes del arresto de D’Monte en Puerto Rico, dos exmilitares canadienses fueron contratados para asesinar a otro de los líderes de la ganga en Tailandia.

“Yo estaba haciendo esa historia de Tailandia cuando sale lo de Conor D’Monte en Puerto Rico. Es interesante como las gangas de Canadá ahora se han convertido en entidades internacionales”, agregó.

AMENAZADA DE MUERTE

“Mientras estaba cubriendo el juicio de uno de los subalternos de D’Monte, uno de los testigos que era miembro de la ganga y estaba cooperando con las autoridades, dijo en plena corte de que él estuvo guiando alrededor de mi casa porque querían saber donde encontrarme. Dijo que D’Monte le había dado la orden de que matara porque no le gustaba lo que yo estaba publicado en el periódico”, manifestó Boland.

“Él (D’Monte) quería saber dónde yo vivía, y cómo me movía para saber dónde matarme. Yo me enteré de eso, literalmente, mientras estaba en sala en el tribunal. A mí nadie me alertó, ni las autoridades. Terminé escribiendo una nota sobre eso. Eso es algo que normalmente nosotros los periodistas no hacemos. Yo era la única periodista en esa sala, y así que tuve que hacerlo, fue bastante duro”, agregó.

Boland nunca ha visto personalmente a D’Monte, aunque como se dedica a cubrir temas de crimen organizado, sí ha cubierto juicios de sus cómplices.

“Yo sé que los periodistas son perseguidos en diferentes partes del mundo, pero en Canadá es bien raro que a un periodista lo amenazan de muerte, así que este esta noticia generó bastante sorpresa. Yo no sé si a él le van a radicar cargos por haber puesto un hit para matarme, pero lo cierto es que yo soy una periodista, y voy a seguir continuando con mi función de informar a lo que sea eso es lo que nosotros hacemos”, agregó.

La laureada periodista y profesora, dijo que anticipa viajar a la isla para cubrir el caso de D’Monte y “ver de frente por primera vez al hombre que dio la orden para matarme”.


LARGO PROCESO PARA D’MONTE

D'Monte fue acusado en 2011 de asesinato en primer grado por la muerte de Kevin LeClair, quien era miembro de la ganga rival Red Scorpions. Se le acusa también de conspiración para matar a miembros de la ganga Bacon y otros rivales en 2008 y 2009.

Para entonces, el nativo de Vancouver había huido y pasó 11 años escondido hasta su arresto en Isla Verde, el pasado 25 de febrero. Ahora se encuentra en la cárcel federal esperando una audiencia de extradición. El jueves, un juez federal ordenó la detención de D'Monte durante 90 días para dar tiempo a las autoridades canadienses a presentar su solicitud formal de extradición para el fugitivo que ahora tiene 44 años.

Durante su aparición en video, el hombre conocido en Puerto Rico como filántropo y entusiasta del tenis de playa, Johnny Williams, estuvo representado por un defensor público.

Una declaración jurada presentada como parte del caso en su contra, enumera los alias de D’Monte en Canadá antes de desaparecer: Brian Black, Manuel Ortega, Leonard Gordon Douglas y Benzo.


En Puerto Rico el individuo se hacía presentar como millonario, filántropo y líder comunitario, cofundador de la empresa Karma Honey Project, dedicada a promover la apicultura. Esa entidad manejó cerca de $3 millones, mayormente de donaciones de inversionistas bajo las leyes 20-22.

Fue a través de esa entidad que hace poco más de dos semanas participó en un evento en La Fortaleza y su nombre figuró en el comunicado que emitió el gobernador Pedro Pierluisi. La fundadora de KHP Candice Galek, así como el gobernador y otros se distanciaron del asesino, pero trascendió que ella tenía una relación amorosa con D’Monte.

D’Monte se presentaba como enlace entre los empresarios de las Leyes 20-22 con políticos del patio. Se jactaba de sus vínculos con La Fortaleza e incluso participó en eventos de recaudación de fondos con líderes como el secretario general del Partido Nuevo Progresista, Carmelo Ríos, o el alcalde de Río Grande y miembro del Partido Popular Democrático (PPD), Ángel Boris González. El portavoz del PPD en el Senado, Javier Aponte Dalmau, confirmó a la prensa que se reunió en su oficina con D’Monte y que presentó una legislación para beneficiar a los apicultores, pero que luego lo retiró porque habían varios proyectos sobre el mismo fin.



1 comment:

  1. Dejame escribir por aquí ya que vi en google la misma información de la periodista Bolan.
    Que drama mas intenso... Cuantas organizaciones en PR también recibirán donaciones y posible lavado de dinero y nadie las investiga. Sería excelente que siguieran buscando y dejen al Canadiense tranquilo. Se le saca punta a lo fácil, al trabajo que ya las autoridades federales han hecho. Ya el tendrá su cita...

    Escribo ya que nadie escribe, pues para ser el primero

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