Todo en familia

El mismo día en que las autoridades federales arrestaron por corrupción al presidente de la Federación de Alcaldes, Ángel Pérez, por esquemas con contratistas del gobierno, el gobernador Pedro Pierluisi aparece cortando la cinta de un negocio familiar.

Su nuera, Blanca Hebé López, se asoció a Corcoran Group para vender propiedades de bienes raíces de lujo, comenzando con un proyecto costero de dudoso desarrollo que pertenece al empresario John Paulson. López, es la esposa del hijo del mandatario, Michael Pierluisi.

López-Pierluisi y sus socias venderán la propiedad de Paulson que ubica en un terreno de alto impacto costero en una zona de El Condado donde el mar ha penetrado.

Vanderbilt Residences, anteriormente denominado 1149 Ashford, fue anunciado por primera vez en 2018, pero el proyecto se detuvo. En ese momento, Paulson & Co. prometió construir la torre residencial de lujo más alta de Condado. Los apartamentos se venderían a $3 millones los apartamentos, pero el proyecto no se concretó por el impacto del mar, tras el paso del huracán María, y por oposición de los vecinos.

Paulson le había pedido al gobierno que construyera un rompeolas para proteger su propiedad. El rompeolas hasta ahora no se ha hecho por los altos costos, y porque conllevaría estudios por autoridades federales ya que cambiaría las corrientes marinas de la región y tendría un impacto en otras zonas donde el mar penetra.

John Paulson

Una controversia parecida por la construcción de una verja y una piscina frente al mar en el proyecto Sol y Playa, mantuvo a decenas de personas en protesta frente a la playa Los Almendros en Rincón. Pero en este caso se trata de la zona del Condado, que por décadas ha sido impactada con edificios frente al mar, que enfrentan erosión.

Paulson es el dueño de los hoteles La Concha y Condado Vanderbilt, que puso en venta, como precisamente reportó hace dos días The Wall Street Journal  y Bloomberg. Hay otros hoteles en venta como el San Juan Water and Beach Club, como parte de un boom en ese sector, reportó la prensa local.

Con un patrimonio neto de sobre $4,800 millones, Paulson es uno de los beneficiarios de la Ley 22 que incentiva el traslado de inversionistas a Puerto Rico para evadir pagos contributivos. Su cartera de propiedades residenciales y comerciales incluyes además a Harbor Lakes en Palmas del Mar, Serafina Beach Hotel, La Concha A Renaissance Hotel y The Condado Vanderbilt Hotel; así como los edificios de oficina clase A, 270 Plaza, American International Plaza en Hato Rey y el lujoso resort St Regis Bahia Beach. Fue en esa propiedad en la que López celebró su boda con Pierluisi.

En momentos en que los casos de corrupción de los alcaldes de Cataño y Guaynabo, y el vicealcalde de Trujillo Alto acaparan la atención pública, el gobernador participó del anuncio de esa empresa de real estate que dirige su nuera.

En una nota publicada en El Nuevo Día, López-Pierluisi dijo que regresó a vivir a Puerto Rico porque vio la oportunidad de negocios tipo nicho ya que “el aumento de extranjeros y estadounidenses residiendo en la isla potenció  el mercado  de bienes raíces”.

“Las personas que se están mudando a Puerto Rico conocen muy bien la marca (Corcoran Group) y eso nos va a ayudar muchísimo”, dijo al diario.

El mercado de lujo ha crecido en más de un 100% en algunas zonas, según indicó López-Pierluisi.  “Estos precios jamás se habían visto en Puerto Rico y se asimilan a precios de propiedades en Nueva York, San Francisco y Hong Kong”, dijo al rotativo.