Periodista independiente en Puerto Rico

Wednesday, January 19, 2022

Tres años después, multa de $20,000 a un corrupto en Turismo

Tres años más tarde, la Oficina de Ética Gubernamental (OEG) impuso una multa de $20,000 al director de recursos humanos de la Compañía de Turismo, Jovani Nevárez Oliver, por obligar a los empleados de la agencia a comprar boletos para actividades políticas del exgobernante Ricky Rosselló.

Este caso fue revelado originalmente por En Blanco y Negro con Sandra el 9 de julio de 2019, un día antes de que reveláramos las primeras páginas del infame chat de Telegram que provocaron los eventos del Verano de 2019 y precipitaron la salida de Rosselló de la gobernación. Pero tres años más tarde, fue que tuvo una solución parcial con la multa, ya que el funcionario sigue en su puesto.

El caso vincula además al analista político e historiador Mario Ramos, quien, aunque es estadista, radicó la querella original porque fue obligado a contribuir a la campaña de Rosselló por su supervisor.

El director ejecutivo de la OEG, Luis A Pérez Vargas, establece en su resolución que Nevárez Oliver violó tres incisos de la Ley de Ética Gubernamental que establecen que cuando un servidor público “usó los deberes y facultades de su cargo, la propiedad o fondos públicos con el fin de proporcionarse a sí mismo, a una persona o negocio, cualquier beneficio que no esté permitido por ley”. Por los tres incisos la multa ascendió a $20,000.

“La evidencia demostró que, el 21 de marzo de 2019, utilizando su puesto como director de la Oficina de Recursos Humanos y Administración de la CTPR, el querellado instó en varias ocasiones al Sr. Mario Ramos Méndez, supervisor de la CTPR, a que comprara tres taquillas para el entonces gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló Nevárez. Esta actividad era con fines político-partidistas, auspiciada por un comité político: Comité Ricardo Rosselló. El querellado le reclamó al señor Ramos Méndez que éste nunca había comprado taquillas (sic) y le indicó que tenía que cooperar, ya que él recibía un diferencial de $1,000. Ante estas inasistencia del querellado, y por las presiones recibidas por parte de éste, el señor Ramos Méndez accedió a comprarle dos taquillas valoradas en $150 cada una, beneficiando al Comité Ricardo Rosselló. Lo anterior ocurrió en la propia oficina del querella en al CTPR”, establece en la resolución.

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