Alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz y el periodista de Telemundo Jorge De Castro Font. |
En Puerto Rico, el crimen paga. Además, se premia al
que roba, al que miente, al que extorsiona y es corrupto. Si no me cree, les
pregunto, ¿vieron al exlegislador Jorge De Castro Font con gabán, corbata y
micrófono en mano frente al Partido Popular Democrático haciendo de periodista
y entrevistando a sus excompañeros políticos? Ni en una película de Fellini
se vio una escena así de surrealista. ¿Es ese el nuevo periodismo
puertorriqueño?
La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, quien se
proyecta como la más ética no perdió oportunidad para darle entrevista al
exconvicto. Lo mismo el alcalde de Caguas, William Miranda hijo, quien a duras
penas existe en la opinión pública. A eso han llegado políticos y medios. Y yo
pregunto, ¿dónde están los gremios de periodistas exigiendo respeto por el
oficio? ¿Las organizaciones cívicas cuyos líderes se rasgan las vestiduras como
paladines de la decencia, callan por miedo a que después los veten y no los
entrevisten?
Así como hoy vimos a una persona convicta por extorsionar
y sobornar a otros, por el robo de fondos públicos, por mentir, por apropiación
ilegal, evasión contributiva y por usar sus influencias como lo es De Castro
Font, no nos debe extrañar que veamos pronto al asesino confeso Alejo Maldonado
como reportero en escenas de crimen, o a otros exconvictos detrás de los
micrófonos en la radio o en la televisión. Son muchos más expolíticos, exnarcos
y otros que han recibido el premio de trabajo a cambio de rating. (Ver Presos
de los Medios)
Es evidente que en los medios de comunicación en
Puerto Rico abunda una mafia que quiere embrutecer a este pueblo, y más que
nada, llevar el mensaje de que para poder ser alguien en la vida, hay que ser
un criminal o un corrupto. Apenas a dos días de que se premiara la “excelencia”
en el periodismo en la gala del Overseas Press Club, a semanas de otra premiación
al trabajo de los reporteros en la Asociación de Periodistas de Puerto Rico y a
menos de un mes de la Semana de la Prensa, en Telemundo se demostró ayer que
los puestos de reporteros se los dan a exconvictos.
Ahora mismo en Puerto Rico hay cientos de periodistas
con experiencia y recién graduados de las universidades que se debaten entre
irse a otro país o seguir laborando en restaurantes y “fast foods” porque no
encuentran trabajo. Esto es parte de las denuncias que desde el 2010 he venido haciendo
en este blog En Blanco y Negro con
Sandra, en mi libro homólogo y en cientos de columnas, sobre cómo se ha transformado
el ejercicio del periodismo y las prioridades en el negocio en los medios de comunicación.
El récord está ahí, y solitario que ha sido.
La tendencia a poner a estas personas en los medios viene
por múltiples factores. Gente sin educación ni escrúpulos dirigiendo medios o tomando
decisiones, enfoque en generar ratings sólo para conseguir anunciantes y la crisis
económica en los medios, que ha provocado pérdidas de hasta 50% o más en
publicidad en ciertos medios, y sobre 3,000 despidos de periodistas y cierres
de medios, pero también tiene mucho que ver con lo que hacen los empresarios mediáticos.
Las gerencias y empresarios mediáticos no quieren
reporteros porque no quieren personas que hagan preguntas o fiscalicen todo el
tiempo. Por eso ven que los despiden, cuando son mayores los sacan del aire, y buscan
a cabilderos, políticos que son empleados de legisladores, políticos que
perdieron elecciones, abogados y exconvictos, gente sin experiencia y muchos
sin formación profesional, a usurpar puestos de periodistas. Pasa en la radio,
en la televisión y en menor medida, en prensa.
Lo peligroso de esto es la contratación de exconvictos
y estos cabilderos, que generan una opinión pública cuyo objetivo es dormir a
las masas para que no estén atentos a lo que de verdad es importante.
Ciertamente, toda persona que haya sido convicta y cumplido
con la sociedad – incluyendo a De Castro Font, a Maldonado y otros – tienen derecho
a rehabilitarse, pero no a quitarle oportunidades a tantos jóvenes decentes que
hoy intentan trabajar en lo que estudiaron y no lo logran en los medios. Más que
nada, a usar los micrófonos y cámaras para convertirse en portavoces o
analistas. Es como si dieran clases al público de Corrupción 101 o Robo 102.
Sabemos que hay indignación en amplios sectores del público
al ver que estas personas los premian con trabajo que podrían darle a gente
decente. Lo preocupante es la hipocresía de las organizaciones cívicas y de
amplios sectores de la sociedad.
No podemos olvidar la indignación colectiva y la movida
que se hizo para presionar a anunciantes y terminó con el boicot al programa
SuperXclusivo de Kobbo Santarrosa en Wapa. El 8 de enero de 2013 ese programa
que era el de más audiencia en toda la televisión, salió del aire. Obvio que su
discurso homofóbico y racista no podía continuar, pero la pregunta es ¿por qué
antes sí y ahora se permite y se aplaude a los que se enriquecieron con el
dinero del pueblo, y que por personas así es que este país está en quiebra y
con una Junta de Supervisión Fiscal? Ese es el nivel de cinismo e hipocresía de
los grupos aquí.
De Castro Font siempre mantuvo una relación abierta
con los periodistas cuando fue legislador tanto por el Partido Popular
Democrático, como por el que fue convicto, siendo del Partido Nuevo
Progresista. Lo conocí y entrevisté muchísimas veces y siempre fue afable,
cordial, respetuoso y educado. Sin embargo, es un corrupto. El mismo, incluso,
le reconoció a El
Nuevo Día al salir de presión que “siempre me van a decir corrupto”.
El ahora periodista de Telemundo salió en libertad bajo un programa de desvío del
Departamento de Corrección tras más de cinco años en prisión federal y estatal.
Se informó que sería asesor para Auto Cash,
una de las empresas de Salomón Levis. El exlegislador se declaró culpable en el
2012 de 93 cargos de extorsión, soborno, perjurio, violaciones a la Ley
Electoral, apropiación ilegal por evasión contributiva y violaciones al Código
de Rentas Internas por no rendir planillas de contribución sobre ingresos y por
informes falsos.
En el ámbito federal, en el
2011 De Castro Font fue sentenciado a cumplir cinco años de cárcel y tres en
libertad supervisada por 21 cargos de fraude al privar al pueblo de Puerto Rico
de servicios honestos y de conspiración de extorsión al aceptar que de 2005 al
2008 solicitó pagos en efectivo y regalías a cambio de beneficiar a terceros y
aprobar proyectos de ley. En total estuvo cuatro años y cuatro meses en la
cárcel federal y un año en la estatal, además de probatoria.
ALGUNAS REFERENCIAS SOBRE EL TEMA DE BOICOTS, EXCONVICTOS
Y MEDIOS:
- 2. La Comay es prensa y un reto al periodismo https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2012/08/la-comay-es-prensa-y-un-reto-al.html3. Reacciones a La Comay https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2012/08/reacciones-la-comay-mi-respuesta-inicial.html4. Relato de un linchamiento cibernético https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2012/08/relato-de-un-linchamiento-cibernetico.html5. Yo no soy José Enrique https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2012/12/yo-no-soy-jose-enrique.html6. El chisme, ¿es noticia? https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2013/08/el-chisme-es-noticia.html7. Chisme farandulero Parte 1 https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2014/09/chisme-farandulero-parte-1.html8. Chisme vs. noticia https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2013/03/chisme-vs-noticia.html9. Los periodistas como amenaza al periodismo https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2012/12/los-periodistas-como-amenaza-al.html10. Presos de los medios https://enblancoynegromedia.blogspot.com/2017/01/presos-de-los-medios.html
Tranquilos, pronto veremos a Víctor fajardo con un micrófono... En Puerto Rico, cualquiera que se meta una grabadora debajo del brazo y con un micrófono en la mano es periodista. De quién es la culpa? Sencillo; de su propia asociación de periodistas que no se protegen. Cualquiera es igual que ellos y lo aceptan. Que no? Ejemplo... Todos los que participan en un programa de chismes son periodistas, ellos se se hacen llamar miembros de la prensa... Sonya Cortez, Rafael José ect, son periodista ...ufff que feo Falelooo.
ReplyDeletejajajajajajaja eso es correcto ,
DeleteTranquilos, pronto veremos a Víctor fajardo con un micrófono... En Puerto Rico, cualquiera que se meta una grabadora debajo del brazo y con un micrófono en la mano es periodista. De quién es la culpa? Sencillo; de su propia asociación de periodistas que no se protegen. Cualquiera es igual que ellos y lo aceptan. Que no? Ejemplo... Todos los que participan en un programa de chismes son periodistas, ellos se se hacen llamar miembros de la prensa... Sonya Cortez, Rafael José ect, son periodista ...ufff que feo Falelooo.
ReplyDeletePopeye el sicario de Pablo Escobar es un ejemplo...Amiga Sandra lo que vende es el Morbo. 🤔
ReplyDeleteLo importante es saber que nos quieren engañar
ReplyDeletePero es que eso no es periodismo. Es entretenimiento y es necesario para los que mandan que el pueblo esté entretenido, distraído. No vaya a ser que piense y cambien las cosas.
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